Pâques et Religion..

Que onda lectores,

Les presumo que hoy estoy en día feriado, aunque no es mucho que presumir, ya que en México se encuentran de vacaciones la mayoría.

Acaba de concluir la famosa "Semana Santa" que todo mundo, católicos ó incluso ateos ó gente de otras creencias, disfruta, gracias a que hay vacaciones escolares y en algunos trabajos.

Lo que no entiendo es porqué hubo puente si todo el rollo acabó el Domingo, pero no soy quién para quejarme, por mí está bien.

Les hablaré un poco sobre esta semana, que seguro conocen, pero les quiero platicar de todos modos, además de un poco del punto de vista de este país.

Cuando eres católico, ya seas gringo, francés, mexicano ó argentino, parece que no hay muchas diferencias con los demás, y esto lo digo, ya que estas fiestas se celebran prácticamente con la misma idea que en México, con el mismo significado de la muerte de Cristo, su Resurrección y todo lo que conllevan.

La diferencia podría quedar en la manera de festejarlo, y creo que en México tiene más folclore. Claro, para la gente muy católica, porque hoy en día, cada vez la gente es menos creyente, ó celebra menos las festividades religiosas, pero esto no es un debate de religiones ó crítica a alguna de estas, por lo que continuaré.

La semana santa aquí, al igual que en México, te impide comer carne, hacen el viacrucis y las misas correspondientes, aunque de una manera más "discreta", ó sin tanto color, como podría ser en México.

Claro, también influye que México es un país con mucho más presencia del catolicismo, siendo el segundo país en el mundo con más católicos, y tienen costumbres como el Día de Muertos, además de que es un país más alegre y festivo.

Algo que me gustó mucho de aquí, aunque aparentemente se hace cada vez menos, y en México prácticamente nadie lo hace, es que la noche del Sábado, para despertar el Domingo de Resurrección, aparecen alrededor del jardín de las casas, todo tipo de chocolates para los niños de las familias, entre ellos los famosos huevos y conejos de pascua.

Esta tradición comenzó en la antiguedad, y es que según esto, desde las culturas más antiguas regalaban huevos como símbolo de renovación ó de fecundación. Pero fue hasta el siglo XIII que comenzó a ponerse de moda en Europa, y simbolizaba que acababan las restricciones del Invierno, y se decoraban con metales preciosos ó de pinturas de artistas famosos, alcanzando su apogeo por ahí del Siglo XIX, pero después la tradición se fue renovando y es como ahora, con los huevos de chocolate, y ya no se relaciona tanto con la religión.

Aquí, aparentemente, cada vez se hace menos, y se me hace una lástima, porque la verdad se me hace muy padre todo ese rollo, y es una buena excusa para estar juntos en familia.

Ahora quiero platicarles un poco sobre la religión aquí, pero no pretendo hacerlo como crítica ó opinión, sólo decir lo que veo. Qué mejor momento de decirlo, que justo después de la celebración más conmemorativa de la religión católica, la más presente en Francia.

Francia, como república y gobierno, está formada como un país laico, con libertad de religión, aunque la gran mayoría de la población es, y siempre ha sido, prácticamente desde sus inicios como nación, católica.

Este país, comparado con el nuestro, tiene una amplia variedad de religiones, y es que, aunque como dije, la mayoría son católicos, puedes encontrar muchos musulmanes, judíos, ateos, budistas, etc., aunque claro, muchos no son franceses de nacimiento, ó son ilegales. De hecho, la comunidad judía en Francia es la más grande de Europa, con aproximadamente 60,000 creyentes.

Además, el catolicismo ha perdido muchos creyentes en los últimos años, ya que hace como 15 años, el 80% de la población era católica, pero hoy en día ya se redujo por ahí del 50%, seguida de los ateos, con más del 30%.

La verdad, estas cifras me sorprendieron mucho, ya que yo siempre tuve una visión de este país como muy católico, en general.

Obviamente, todavía queda gente muy católica, pero cada vez menos.
Me dijeron que había familias, no se si hasta el día de hoy, que siempre, antes de comer, bendecían el pan que utilizaban para la comida ó la cena.
Claro, por más católicos que podamos ser en México, eso no se podría hacer, ya que no comemos el pan de la manera que ellos, y en nuestro caso sería ponerse a bendecir el kilo de tortillas.

Según he escuchado, también en Francia están teniendo problemas en cuanto a no poder encontrar padres que den las mismas en los pequeños pueblos, ya que todos quieren permanecer en las grandes ciudades, y los pueblos acaban teniendo que cerrar sus iglesias.

Pero claro, esta religión, perdiendo creyentes ó no, tendrá una presencia permanente en el país, debido a la enorme cantidad de iglesias y catedrales que se encuentran alrededor del país, y que influyen mucho también para el turismo en el país.

Antes de despedirme, les quiero comentar que acabo de leer mi primer libro en francés, y no es por presumir que leo, ni mucho menos, sino que para mí, demuestra todo lo que he logrado avanzar en mi francés desde que he llegado, al grado de poder leer tranquilamente un libro en francés.
Claro, obviamente había muchas palabras que no conocía, pero eso también demuestra que todavía falta mucho por aprender, a pesar de que ya se logró mucho.

El libro, traducido en español, se llama "Las 5 personas que me encontré en el cielo", y se los recomiendo.

Hasta la próxima entrada..